Lo que a continuación voy a relatar es un breve testimonio de un hecho de la vida real, esto es algo que no fue leído en una novela ni tampoco de mi imaginación, esto ocurrió aproximadamente hace 14 años; mas sin embargo para un servidor es como si hubiera pasado recientemente y lo traigo en mi mente y en mi corazón tan vívido que hasta parece que fue ayer cuando esto sucedió.

Voy a tratar de explicarlo lo mas sencillo posible para que sea comprensible a toda aquella persona que tenga ó nunca haya tenido un encuentro personal con Jesucristo, ya que la Biblia menciona que las cosas espirituales se han de discernir espiritualmente, yo sé con plena certidumbre en mi corazón que estos escritos van a llegar a diferentes personas con diferentes tipos de pensamientos y creencias acerca de lo que Jesucristo puede hacer todavía, hoy y aquí en los albores del milenio venidero.

LA PREPARACIÓN

Mi padre fue un hombre que no le hacía daño a nadie y al igual que muchos de nosotros, también creció con una creencia familiar y con un concepto acerca de lo espiritual como alguna vez lo tuvimos tu y yo ó mas bien lo tienen la mayoría de las personas, un pensamiento que es hereditario, y menciono la razón hereditaria porque cuando le preguntamos a alguien del porqué de su creencia inmediatamente nos mencionan que eso es inculcado por sus padres ó por sus abuelos y toda esta creencia viene de padres a hijos, la Biblia menciona que por nuestras tradiciones no nos vamos a salvar sino solamente aquella persona que tenga a Jesucristo en su corazón y es aquí donde quiero dar inicio a este breve testimonio.

Hace muchos años según mi padre me comentó alguna vez, tuvo una diferencia ó altercado con una persona y que por razones obvias me reservo el derecho de mencionar su nombre por ética, por respeto y por no herir alguna susceptibilidad pero que no por no mencionarlo le reste importancia ya que esto que le sucedió fue parte de su preparación para lo que habría de venir unos años mas adelante. Fue tanto y tan pesada aquella diferencia que para no entrar en detalles, según me comentaba mi padre cuando se llegaban a cruzar frente a frente en la calle uno se iba por un lado y otro por el otro lado de la acera para no seguir con esta rencilla que yo en lo personal creo no los llevaba a nada bueno y ustedes se preguntarán que a que viene todo esto, bueno, es que cada quién siguió por su camino y en diferentes rumbos y la preparación DIOS se la tenía preparada a cada quien por su propio camino y en diferentes lugares. Lo que DIOS hace nadie lo deshace y lo que DIOS ata nadie lo desata.

Estando en casa, uno de mis hermanos, mi padre y yo, estábamos viendo la televisión como eso de las 10 de la mañana, mientras papá se encontraba en la parte de afuera de la casa recogiendo una arena que estaba regada por todos lados, cuando de repente oímos un golpe como si alguien se hubiera caído y golpeado en la cabeza é inmediatamente salimos mi hermano y yo para ver que había sucedido y tristemente mi padre es el que se había caído y se había golpeado en la cabeza a causa de un paro cardíaco, mi hermano y yo nos quedamos por unos instantes sin saber que hacer ante estas escenas que teníamos ante nuestra presencia pero el sentido de conservación y la pronta ayuda para mi padre nos hizo movernos lo mas rápido posible, entre los dos lo llevamos hacia el interior de la casa para darle alguna clase de auxilio, como pude y como Dios me dio a entender me puse encima de su cuerpo tratando de darle masajes al corazón pero tristemente sin ningún resultado positivo, por el movimiento y la desesperación mi hermano corrió a pedir ayuda a alguien de nuestros vecinos é inmediatamente la ayuda llegó, cargamos a mi padre y lo introdujimos a un carro, es bonito saber que Dios puede hacer las cosas y que Dios hace milagros, eso tanto tu como yo lo sabemos pero sin embargo cuando nos encontramos en una situación como esta queremos que Dios nos responda como si Dios estuviera en una lámpara maravillosa y que al momento que nosotros lo deseáramos, ahí con mi padre en mi regazo y sin vida, amoratado de su cara y con la lengua fuera de su boca es difícil poder disuadirnos del poder de Dios, mas sin embargo había algo en mi mente que repiqueteaba en lo mas profundo de mi corazón y mi razonamiento, en alguna ocasión le oí decir a mi madre que si clamábamos a Dios El nos respondería y realmente la palabra de Dios ahí estaba en mi mente repiqueteándome a cada rato " Clama a mí y yo te responderé ", si, yo lo sabía pero se me hacía difícil poder practicarlo en aquellos momentos mas duros de mi existencia, de donde se encontraba mi casa a la clínica hay como unos 15 ó 20 minutos de trayecto, minutos que mi padre necesitó para su respiración y que desafortunadamente le hicieron falta, cuando llegamos a la clínica inmediatamente salieron unos médicos y aún estando en la camilla le administraron una inyección directamente al corazón y lo introdujeron hacia el interior del área de enfermos en la sala de emergencias, minutos mas tarde sale el doctor para decirme que habíamos llevado a mi padre demasiado tarde y probablemente ya no habría remedio ya que debido al golpe en la cabeza y el paro cardíaco mi padre sufriría de vida vegetal en caso de que se pudiera salvar y que lo trasladaría para el hospital de Zona de la ciudad de Monterrey para que tuviera una atención mas adecuada, yendo en el camino había mucho tráfico y el trayecto de la clínica hacia el Hospital de Zona se me hizo demasiado largo, viendo a mi padre en la camilla dentro de la ambulancia le podía ver un rictus de muerte en su rostro debido a que mi mente ya no podía concebir otra cosa, y uno de los paramédicos me dijo " Crees en Dios " a lo cuál yo le dije que sí y me contestó: entonces aférrate a El y clámale con todas tus fuerzas.

 llegando al Hospital nos esperarían los días y las horas mas amargas de nuestra existencia. Inmediatamente mi padre fue llevado hacia el interior del Hospital y fueron largas las horas de espera en las cuales teníamos la esperanza, mi Madre, mis hermanos y yo de escuchar algo positivo, El primer parte Médico nos bajaron la guardia y nos quitaron toda esperanza ya que el médico nos dijo que iba a ser sometido a diferentes tipos de medicamentos y conforme a la reacción que fuera teniendo le iban a administrar un medicamento cada vez mas fuerte, los días pasaron y la primer semana llegó sin resultado positivo alguno, cada reporte médico era lo mismo y nos decían que el paciente no mostraba ninguna mejoría, allí en la sala de espera de Terapia intensiva incliné mis rodillas para realmente clamarle a Dios y fuera Él con su poder y su misericordia que lo levantara de entre los muertos, pasó la segunda semana y otra vez lo mismo, pasó la tercer semana y no hubo ninguna mejoría, pero hubo un día que nos acercábamos para escuchar el reporte médico y la doctora que salió a darnos dicho reporte nos dijo una vez mas que lo sentía mucho y que fuéramos haciendo los preparativos y prepararnos para lo peor, yo me sentía decaído, triste y sin ganas de nada, me encaminé hacia el elevador y ya estando en la planta baja se oyó por el altavoz donde llamaban a los familiares de Filiberto Castillo Díaz y yo esperaba el tiro de gracia a mi razonamiento, a mi corazón y a mis creencias y me encaminé hacia la sala de terapia intensiva y cuando estábamos mi madre y yo esperando alguna respuesta, salió la doctora que unos minutos antes nos había dicho que nos preparáramos para lo peor, salió agarrándose y estirándose los cabellos y haciendo una expresión en su rostro de incredulidad ante lo desconocido para la ciencia médica pero posible para Dios, nos menciono: " yo no sé que está sucediendo en terapia intensiva y nunca había visto nada igual, pero tu papá no tan solo tuvo una reacción positiva sino que está moviendo sus pies y sus brazos y esto no lo puedo explicar ". Cuando no estamos ó cuando no somos parte de un milagro jamás lo podremos explicar pero cuando formamos parte de ese círculo en el cuál Dios es el centro todo es posible, el milagro esperado unas semanas atrás había llegado, cuál Lázaro levantado de la tumba mi padre fue rescatado de las garras de la muerte por el poder de Dios

VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE

Hay cosas que para nosotros son tan inexplicables y a veces tan difíciles de creer y de aceptar cuando nos enfrentamos a lo desconocido, a lo ilógico, a lo inverosímil que casi siempre buscamos una salida que para nuestro razonamiento sea aceptable, unas semanas mas tarde y estando platicando con el médico que llevaba el caso de mi padre, me dijo que le preguntara a mi padre que a donde fue ya que el estaba seguro que había hecho un viaje muy largo y que según las estadísticas de la medicina si es posible que una persona que ha estado en coma haya viajado a alguna parte en algún lugar determinado.

Hubo un día que estando a la mesa comiendo junto a mi padre, le hice esta misma pregunta y le dije que el médico me había dicho que El quería saber en donde había estado en el viaje que hizo a lo cuál cerrando sus ojos comenzó a recordar y después de un buen rato me contestó que en efecto El había ido a un lugar llamado Chetumal y que estaba muy bonito, quizá para muchos de nosotros no suene fuera de lo normal pero para mi, en lo personal, sonó un poco sobrenatural ya que él nunca visitó aquel lugar estando en vida, volvió a decir que tuvo que pasar por un largo túnel por donde solamente se encontraba una salida y que al final del túnel se veía Chetumal, y dijo que no pudo pasar a través de esa puerta porque alguien se lo había impedido y le dijo que todavía no era el tiempo de cruzar por esa puerta y durante el trayecto mi padre vio a mi abuelo, quien había muerto muchos años atrás. Yo en lo personal creo que cuando alguna persona está en este estado vegetativo DIOS hace cosas con estas personas que simplemente son increíbles pero no imposibles para DIOS la Biblia menciona que lo que para el ojo humano es imposible, para Dios todo es posible Dios en su infinita misericordia nos prestó a mi padre 3 años mas y durante este tiempo, lo crea ó no lo crea, mi padre vivió con un concepto acerca de Dios y todo lo espiritual en una forma diferente.

Un año mas tarde estando en la iglesia, fuimos a una reunión y mi padre y yo estabamos atentos escuchando las alabanzas a Dios y cuando se llegó la hora del mensaje, le dieron la bienvenida al predicador de esa tarde, pasó al frente, abrió su Biblia para iniciar el sermón y cuando leyó las Sagradas Escrituras dijo algo que para los que estabamos ahí presentes, nos desconcertó diciendo: "No voy a predicar, porque aquí se encuentra una persona que hace muchos años yo ofendí demasiado y no puedo comenzar a predicar sin antes pedirle perdón a esa persona". Después de dicho esto se encaminó hacia donde se encontraba mi padre y le pidió perdón y los dos se dieron un abrazo en el cuál en medio de ese abrazo se encontraba el perdón de Dios para ambas almas que en alguna ocasión se habían peleado muy duramente hacía mucho tiempo y esto es lo que les mencionaba al principio que Dios estaba preparando tanto a mi padre como a la otra persona para que sus almas pudieran descansar en el día postrero.

¿ MILAGROS HOY ?

Vivimos en una época en la que solamente es verdadero aquello que podemos ver y tocar y aquello que tiene alguna explicación lógica y aceptable para nuestro razonamiento, mi padre aunque Dios lo levantó de entre los muertos, vivió solamente tres años mas. la Leucemia fue presa de su cuerpo pero no por eso dejo yo en lo personal de creer en Dios ¿ que es un milagro ? esta es una pregunta que no tiene fácil respuesta pero, que si crees ó no crees esto no quiere decir que no existan los milagros, solamente lo podemos entender hasta que formamos parte de uno de ellos. Mi padre murió víctima de esta terrible enfermedad en el Hospital 25 de la ciudad de Monterrey, pero aún en su muerte pude ver la magnificencia y el poder de Dios en mi vida, eran como las tres ó cuatro de la madrugada ahí en ese hospital de hace 14 años cuando me dieron la noticia que mi padre había fallecido. Que bueno es cuando estamos preparados para este tipo de situaciones económicamente hablando ya que en ese entonces me enfrenté ante esta realidad sin un centavo en la bolsa para poder solventar los gastos funerarios, mi madre ya estaba conmigo en el hospital y le dije que como le íbamos a hacer para lo siguiente a lo cuál me dijo que le hablara a mi hermano que se encontraba en la ciudad de Houston Texas y sin pensarlo mucho me encaminé hacia un teléfono público y con una moneda de 10 centavos comencé a marcar todos los números de una llamada de larga distancia, quizá podamos pensar ¿que es lo sorprendente de esto ? Hoy en la actualidad se pueden hacer llamadas de larga distancia de un teléfono público, lo sorprendente de esto es que hace 14 años era mas que difícil... era imposible. Dios fue el que lo hizo posible. Quizá tanto para ti querido lector como para mi nos sea un poco difícil de creer y de aceptar lo inexplicable, mas sin embargo es mi obligación decirte lo siguiente: Hay algo que tu y yo sabemos, que no importa quienes seamos ni tampoco que tanto tengamos materialmente, si somos ricos ó pobres, si tanto tú como yo no tenemos a Jesucristo en nuestro corazón, en el momento menos esperado Dios nos puede mostrar ese mismo panorama que Dios le mostró a mi padre, con toda honestidad y con el corazón en la mano te invito a que reflexiones sobre este sencillo pero sincero testimonio que quizá a diferencia de mi padre en vez de aquel lugar selvático y agradable a nuestra vista sea algo desagradable tanto para nuestra vista como para nuestra alma, porque es allí donde estará tu última morada si no aceptas el maravilloso regalo de la vida eterna. La Biblia es muy enfática y muy tajante y nos menciona que solamente hay dos lugares como morada eterna esto es, el cielo ó el infierno y no hay lugares intermedios. Es como toda dualidad, hay maldad y hay bondad, existe lo bueno y existe lo malo, existe el bien y el mal ó simplemente se acepta ó se rechaza, no hay términos medios ó se es frío ó caliente no existen los tibios porque son ellos los que dice el Señor en su palabra " los vomitaré de mi boca "

" porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito, para que todo aquel que en El cree,
no se pierda, mas tenga vida eterna. "

San Juan 3:16.

Jesús Castillo Reyes

Daniel Sapia - "Conoceréis la Verdad"

Apologética Cristiana - ® desde Junio 2000

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